top of page
  • Foto del escritorAdriana Martisa

Cómo Generar Motivación Intrínseca


¿Te ha pasado que un día te despiertas con toda la motivación, listx para cambiar tu vida por completo, sólo para botar tus nuevos hábitos unos días después?


¿Cuántas veces has comenzado rutinas o proyectos que nunca terminas?


¿Te has sentido desmotivadx, atoradx o frustradx con tu vida?


Hoy te cuento sobre los 5 motivadores intrínsecos que necesitas para recuperar tu motivación.




Un letrero de neon sobre una pared de lámina.


Pues te cuento que yo he batallado toda la vida con esto de la motivación. Por AÑOS creí que simplemente no era buena para sostener las cosas en el largo plazo.


Siempre creí que era una excelente iniciadora, pero que había algo mal conmigo y simplemente me faltaba consistencia, compromiso y disciplina.


Ahora entiendo que es un Pensamiento INCORRECTO Fundamental #PIF! Una percepción equivocada del mundo con base en la cual opero y que afecta todo lo que hago.


No es que naturalmente fuera buena iniciadora y mala para construir, sino que nunca aprendí a construir. Nunca aprendí los sistemas para consistentemente mantener una estructura o rutina a lo largo del tiempo y, por lo tanto, simplemente creí que no era buena para eso.



Total que, como es un tema con el que he batallado toda mi vida, lo he estudiado bastante y estoy experimentando mucho con sistemas, procesos y herramientas de productividad.


Hoy me topé con un video muy interesante de Rian Doris que me hizo pensar en cómo generar motivación intrínseca. El video está en inglés, pero te dejo el link por si quieres checarlo: https://youtu.be/K8ZgwZf1E3E?si=tgLpzZPst7eKhH2f



MOTIVACIÓN INTRÍNSECA Y EXTRÍNSECA


Primero, aclaremos que existen dos tipos de motivación, dependiendo de la recompensa que buscamos.


La motivación extrínseca o externa son todos esos objetivos o recompensas que creemos que obtendremos con ciertas conductas. Comienza en el clásico "si te portas bien, te compro un helado", y evoluciona hasta "si trabajo bien, tendré la casa de mis sueños".


Ahora, eso no siempre funciona porque a veces trabajamos mucho y no logramos lo que queríamos. Esas recompensas externas no siempre dependen al 100% de nosotros y es muy frustrante trabajar duro por algo y no lograr los resultados que deseábamos.


También sucede que a veces no tenemos paciencia, como en el gym. Quisiera que después de 1 hora de ejercicio pudiera ver los resultados de inmediato en mi cuerpo, pero la naturaleza no funciona así. Tengo que construir con paciencia para ver los frutos de mi esfuerzo. Y a veces gana la impaciencia, y cortamos antes de poder cosechar los frutos.


La motivación intrínseca es la que nace del interior y no depende de nada externo. Es, algo que natural o artificialmente nos brinda satisfacción interna, gusto, deleite. Por ejemplo, para mí bailar se siente muy bien ¡me fascina! No necesito que nadie me motive o me obligue a bailar. Yo lo hago solita, sólo por placer.


Ahora, no es lo mismo bailar, cosa que naturalmente adoro y disfruto, a trabajar 2 horas extra en mis proyectos personales cuando estoy cansada o hacer ejercicio (que no disfruto particularmente) de forma consistente. ¿Cómo hago las cosas difíciles?



¿CÓMO GENERAR MOTIVACIÓN INTRÍNSECA?


Te tengo una súper noticia: tú puedes genera esta motivación intrínseca con estos 5 motivadores que voy a compartirte. Y, cuando tu motivación baje, puedes recuperarla y cultivarla de nuevo.



1. CURIOSIDAD


La curiosidad está en nuestra naturaleza ¡así es como evolucionamos! De otra forma, jamás nos habríamos preguntado ¿por qué las estrellas cambian de lugar durante el año? ¿o qué pasaría si mezclo esta sustancia con esta otra?


De niños nos motiva la curiosidad. Observamos el mundo, nos preguntamos, experimentamos, probamos cosas sólo por ver qué pasa.


La pregunta es: ¿qué tanta curiosidad sientes por lo que haces? ¿Te apasiona eso en lo que trabajas? Esos proyectos, ya sea del trabajo o de tu vida personal, ¿te provocan curiosidad?


Si tus objetivos van en el sentido del ejercicio, por ejemplo. ¿Te da curiosidad por entender sobre nutrición o cómo funciona el cuerpo? ¿Sientes curiosidad por experimentar con distintos ejercicios, rutinas, etc.?


O en tu trabajo. ¿Te gusta lo que haces? ¿Aprendes por gusto? ¿Te interesa saber más sobre tu empresa, tu materia, etc?


O en tu negocio. ¿Estás haciendo algo que te apasiona? ¿Los temas de los que hablas son interesantes para ti? ¿No puedes parar de hablar de ello y aprender nuevas cosas?


Si notas que la curiosidad te está fallando en eso que intentas hacer, ¿cómo puedes volverte más curiosx? ¿qué cambios puedes hacer para interesarte más en ello?


2. MAESTRÍA


Los seres humanos deseamos ser mejores. La sensación de progreso, de avance, de mejora, es algo fundamental en nuestra autorrealización. Cuando no sentimos que estamos avanzando es muy fácil desmotivarnos.


Una de las grandes razones por las que las personas dejan su trabajo es cuando sienten que no tienen algo por qué luchar, que ya no pueden avanzar en sus carreras, o cuando sienten que lo que ellos ven de mejora cae en oídos sordos y nadie lo toma en cuenta.


Reflexiona sobre tus proyectos y objetivos actuales.


¿Puedes obtener maestría en aquello a lo que dedicas tu tiempo? ¿Qué tanto puedes esforzarte y mejorar? ¿Te emociona desarrollar esas habilidades? ¿Hay margen para la mejora, la optimización y el desarrollo de nuevos procesos?


Si ahora no sientes esa posibilidad para desarrollar tu maestría, ¿cómo podrías incluirla?


3. PROPÓSITO


Los seres humanos necesitamos sentir que lo que hacemos importa.


¿Por qué haces lo que haces? ¿Puedes encontrar dentro de ti razones para hacer lo que quieres hacer, que estén ligadas a tu satisfacción personal?


Esto tiene mucho qué ver con nuestra contribución al mundo. ¿Sientes que eso contribuye de alguna forma al mundo, a tus seres queridos, o a tus clientes?


¿Y te cuento un secreto sobre el propósito?


El propósito lo decides tú, y sólo necesita tener sentido para ti.


Nuevamente, piensa en eso que te está costando mantener, ¿por qué lo haces? ¿En qué te beneficia? ¿Por qué necesitas hacerlo?


Si no tienes claro el por qué y para qué, es muy fácil soltar tus hábitos.


4. DELEITE


¡Mi palabra favorita!


¿Disfrutas lo que haces? ¿Cuántas veces se te ha olvidado comer por hacerlo? ¿Qué cosas realmente disfrutas tanto que no te imaginas haciendo otra cosa?


Ahora, si eso que estás haciendo naturalmente no es algo que disfrutas, ¿cómo puedes hacerlo más disfrutable? ¿qué modificaciones puedes hacer en tu entorno o en tus procesos para disfrutarlo más?


¿Qué cosas disfrutas hacer y cómo incorporarlas a tu rutina diaria? Aquí hay mucho en lo que podemos profundizar, pero el punto es que si no nos gusta lo que hacemos y no estamos dispuestos a hacerlo sin una motivación externa, no podremos sostener nuestros proyectos en el largo plazo.


5. AUTONOMÍA


Este es el último factor y algo con lo que batallamos bastante, sobre todo en lo laboral. Una parte importante de la motivación es el grado de autonomía que tenemos. Si no sentimos que podemos hacer las cosas a nuestra manera y, de cierta forma, hacer propios los procesos, nuestra motivación se reduce radicalmente.


Por eso es que el micromanaging nunca funciona, en prácticamente ninguna circunstancia. El sentir que alguien dicta nuestro actuar momento a momento reduce nuestra motivación y nos convierte en cínicos.


Ahora, obviamente hay ciertos grados de autonomía que cada persona tiene dependiendo de sus circunstancias, puesto, tipo de trabajo, etc. ¿Pero cómo puedes sentir mayor autonomía en tu trabajo del día a día? ¿Qué partes están bajo tu control y qué no? ¿Eso que quieres hacer, puedes hacerlo de forma más independiente? ¿cuál es tu sweet spot personal entre acompañamiento, vigilancia y autonomía?



EN CONCLUSIÓN


No cumplir nuestra palabra es uno de los hábitos que más dañan nuestra autoestima. Sentir constantemente la decepción de no cumplir tus promesas, de no ser consistente, de no terminar tus proyectos... va dañando nuestro autoconcepto poco a poco.


Para tomar el control de tu vida es fundamental desarrollar esta motivación intrínseca y recargarla cuando comienza a fallar.


¡Haces esto porque tú quieres, porque tú lo decidiste!


Cuando tu motivación inicial comience a bajar (porque es su comportamiento natural), revisar estos puntos te puede ayudar a cambiar tu perspectiva y hacer los ajustes necesarios en tus procesos, conductas y hábitos.






¡Hola, yo soy Adriana Martisa! Coach de Felicidad en el Alto Rendimiento. Soy una millennial mexicana, exploradora y hardcore nerd 🤓 Amo aprender y compartir todo lo que aprendo. En este blog escribo sobre high performance, hábitos, organización, productividad y satisfacción personal.


Si te sirvió este artículo, compártelo con alguien más y ven a conversar conmigo en Instagram, Threads o LinkedIn.


Gracias por tu tiempo. ¡Nos leemos pronto!




bottom of page